Yo.
Estoy trasponiendo el umbral de las 4 décadas, cargado de serias enfermedades y el lógico desgaste de la existencia.
Podría decir que alcancé la edad cronológica de la madurez y llevo a cuestas valiosísima información sobre la vida, una gotita de eso que llaman desarrollo intelectual pero, cuanto más conozco, cuanto más aprendo, siento que desconozco tantas cosas que mi fugaz existencia me parece ínfima. Se enervan mis poros al pensar que me falta mucho todavía, tanto que de seguro no llegaré a conocer.
A estas alturas importa todo como siempre y más. Mi médico me sugirió tener actividad física para prolongar mi existencia y por ello, me inscribí en una Escuela certificada de Artes Marciales, llevo algo de 100 días y practico junto a niños, jóvenes y adultos. Estoy partiendo otra etapa, otra que seguiré con la misma tenacidad de siempre(o más)
Lo entretenido de esta etapa, es que comparto las clases de artes marciales con mi hija que está en una edad complicada pero hermosa a la vez.
Tengo una preciosa familia, una raza internacional.
Estoy trasponiendo el umbral de las 4 décadas, cargado de serias enfermedades y el lógico desgaste de la existencia.
Podría decir que alcancé la edad cronológica de la madurez y llevo a cuestas valiosísima información sobre la vida, una gotita de eso que llaman desarrollo intelectual pero, cuanto más conozco, cuanto más aprendo, siento que desconozco tantas cosas que mi fugaz existencia me parece ínfima. Se enervan mis poros al pensar que me falta mucho todavía, tanto que de seguro no llegaré a conocer.
A estas alturas importa todo como siempre y más. Mi médico me sugirió tener actividad física para prolongar mi existencia y por ello, me inscribí en una Escuela certificada de Artes Marciales, llevo algo de 100 días y practico junto a niños, jóvenes y adultos. Estoy partiendo otra etapa, otra que seguiré con la misma tenacidad de siempre(o más)
Lo entretenido de esta etapa, es que comparto las clases de artes marciales con mi hija que está en una edad complicada pero hermosa a la vez.
Tengo una preciosa familia, una raza internacional.
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